(no subject)
Apr. 8th, 2010 01:55 pmHe's an ungodly drug-addicted werewolf looking for a cure to the poison coursing through his veins. She's a sarcastic streetsmart former first lady living on borrowed time. Together, they fight crime!
Oh, apatía, cómo no te he echado de menos.
Mi salud está jugando conmigo. Aún no sé qué se trae entre manos.
La semana pasada empecé mi tercer resfriado. Esta vez, para cambiar un poco, es de garganta. La nariz molesta, y de vez en cuando se dedica a fabricar mocos como si hubiera una necesidad de duplicar la producción nacional y un mercado internacional que abastecer, pero el foco de este resfriado es la garganta. Tos seca, dolor de garganta, rasposidad, voz variable. (No os podéis ni imaginar lo divertida que fue la reunión de ayer de tres horas.)
Este tercer resfriado no sólo es diferente en qué parte del cuerpo me ataca, también es de intensidad más leve. Se refuerza por las noches, pero durante el día me deja bastante tranquilo, cosa que se agradece porque trabajar enfermo es una mierda.
Sigo leyendo La estrella más brillante, el último libro de Marian Keyes. Ya estoy muy cerca del final, 60 páginas, y debo decir que no me ha entusiasmado mucho.
El cine no es tu casa, un artículo muy ilustrativo, enumerando las razones por las que sólo los gafapastas deberían poder entrar en los cines. Especial atención al comentario "¿Y esos que, intentando hacer menos ruido, hacen las cosas a cámara lenta? ¡Qué atrevida es la gilipollez!".
El resto de la entrada se ha perdido en los éteres de los archivos no guardados, porque hoy estamos teniendo un día de flujo eléctrico variable. (Endesa: de héroe a cero en un pis-pas.) Y mi SAI parece estar contento con funcionar sólo durante el primer apagón, y pasa de funcionar en el resto.
Llevamos tres seguidos, de momento. Pero el día es joven.
Oh, apatía, cómo querría echarte de menos.
edit: Oh, this is also good!
He's an old-fashioned albino househusband in a wheelchair. She's a man-hating goth socialite looking for love in all the wrong places. Together, they fight crime!
Oh, apatía, cómo no te he echado de menos.
Mi salud está jugando conmigo. Aún no sé qué se trae entre manos.
La semana pasada empecé mi tercer resfriado. Esta vez, para cambiar un poco, es de garganta. La nariz molesta, y de vez en cuando se dedica a fabricar mocos como si hubiera una necesidad de duplicar la producción nacional y un mercado internacional que abastecer, pero el foco de este resfriado es la garganta. Tos seca, dolor de garganta, rasposidad, voz variable. (No os podéis ni imaginar lo divertida que fue la reunión de ayer de tres horas.)
Este tercer resfriado no sólo es diferente en qué parte del cuerpo me ataca, también es de intensidad más leve. Se refuerza por las noches, pero durante el día me deja bastante tranquilo, cosa que se agradece porque trabajar enfermo es una mierda.
Sigo leyendo La estrella más brillante, el último libro de Marian Keyes. Ya estoy muy cerca del final, 60 páginas, y debo decir que no me ha entusiasmado mucho.
El cine no es tu casa, un artículo muy ilustrativo, enumerando las razones por las que sólo los gafapastas deberían poder entrar en los cines. Especial atención al comentario "¿Y esos que, intentando hacer menos ruido, hacen las cosas a cámara lenta? ¡Qué atrevida es la gilipollez!".
El resto de la entrada se ha perdido en los éteres de los archivos no guardados, porque hoy estamos teniendo un día de flujo eléctrico variable. (Endesa: de héroe a cero en un pis-pas.) Y mi SAI parece estar contento con funcionar sólo durante el primer apagón, y pasa de funcionar en el resto.
Llevamos tres seguidos, de momento. Pero el día es joven.
Oh, apatía, cómo querría echarte de menos.
edit: Oh, this is also good!
He's an old-fashioned albino househusband in a wheelchair. She's a man-hating goth socialite looking for love in all the wrong places. Together, they fight crime!