No fue buena idea quedarme ayer hasta las dos y media escribiendo sobre Clair Obscur: Expedition 33. Quién lo iba a decir, ¿verdad? ¬¬U No es que me arrepienta, pero a lo hecho, pecho. Y otra cosa no, pero tetas tengo ¬¬U
Ayer por la noche me planteé un cambio de horario, para no empezar los días de teletrabajo tan amuermao. Y, oye, la idea era buena: me levanto a las siete, hago el té y desayuno con la calma, aireo la neurona, ventilo la casa, y a las ocho empiezo. Más que nada porque así a las cuatro puedo cerrar y realmente aprovechar la tarde, que últimamente me columpio con esto de que puedo empezar a las nueve y la jornada se alarga y... Pero no contaba yo con ponerme a escribir a las doce y terminar dos horas y media después ¬¬U
Pese a haber dormido poco, he tenido un par de sueños interesantes. Y, aún más sorprendente teniendo en cuenta el foco de ocio que he hecho este fin de semana, no han tenido que ver con videojuegos.
Normalmente en mis sueños me discuto con mi subconsciente, que toma forma de gente conocida. Pero hoy no, hoy hemos tenido una conversación civilizada.
Estaba yo recogiendo pelusas gigantes por casa y estaba hablando con alguien sobre cosas y entonces me dice ese alguien que quizás debería mirarme qué me pongo al salir a la calle porque la ropa no me queda demasiado bien. Y yo, que estaba agachado haciendo bolas con la pelusa para que no se desperdigara y poderla tirar mejor, me he levantado y le he contestado que obviamente ya lo sé, que estoy en ello, y que me alegro que lo diga hablando en lugar de gritando. Y luego me contesta ese alguien que es cierto, que se lo estaba guardando para cuando tuviéramos una discusión.
Vamos, que yo y mi subconsciente tenemos una relación sanísima ¬¬U
También ayer en un arrebato de valentía y aprovechando la lavadora de ropa de cama quité el nórdico. Y, oye, ni tan mal. Pensaba que tendría más frío, pese a dormir con pijama de manga larga. De todas maneras creo que una mantita o algo no me hará mal, porque por la noche aún refresca un poco.
Y ahora, si me disculpáis, voy a hacer la croqueta sobre un rodillo, a ver si me cruje la espalda. Que tengo la impresión que tiene que hacer clack y no soy capaz de encontrar el gesto para provocarlo.
Ayer por la noche me planteé un cambio de horario, para no empezar los días de teletrabajo tan amuermao. Y, oye, la idea era buena: me levanto a las siete, hago el té y desayuno con la calma, aireo la neurona, ventilo la casa, y a las ocho empiezo. Más que nada porque así a las cuatro puedo cerrar y realmente aprovechar la tarde, que últimamente me columpio con esto de que puedo empezar a las nueve y la jornada se alarga y... Pero no contaba yo con ponerme a escribir a las doce y terminar dos horas y media después ¬¬U
Pese a haber dormido poco, he tenido un par de sueños interesantes. Y, aún más sorprendente teniendo en cuenta el foco de ocio que he hecho este fin de semana, no han tenido que ver con videojuegos.
Normalmente en mis sueños me discuto con mi subconsciente, que toma forma de gente conocida. Pero hoy no, hoy hemos tenido una conversación civilizada.
Estaba yo recogiendo pelusas gigantes por casa y estaba hablando con alguien sobre cosas y entonces me dice ese alguien que quizás debería mirarme qué me pongo al salir a la calle porque la ropa no me queda demasiado bien. Y yo, que estaba agachado haciendo bolas con la pelusa para que no se desperdigara y poderla tirar mejor, me he levantado y le he contestado que obviamente ya lo sé, que estoy en ello, y que me alegro que lo diga hablando en lugar de gritando. Y luego me contesta ese alguien que es cierto, que se lo estaba guardando para cuando tuviéramos una discusión.
Vamos, que yo y mi subconsciente tenemos una relación sanísima ¬¬U
También ayer en un arrebato de valentía y aprovechando la lavadora de ropa de cama quité el nórdico. Y, oye, ni tan mal. Pensaba que tendría más frío, pese a dormir con pijama de manga larga. De todas maneras creo que una mantita o algo no me hará mal, porque por la noche aún refresca un poco.
Y ahora, si me disculpáis, voy a hacer la croqueta sobre un rodillo, a ver si me cruje la espalda. Que tengo la impresión que tiene que hacer clack y no soy capaz de encontrar el gesto para provocarlo.