(no subject)
May. 26th, 2011 08:32 amEs curioso cómo hasta los malos sueños tienen su utilidad. Hoy estaba siendo semi-torturado por mi subconsciente mediante un sueño que explota mi capacidad de sentir vergüenza por todo el mundo mediante una cadena muy elaborada de escenas provocadoras de vergüenza ajena hasta que la tensión ha sido tal que me he despertado.
Entonces he recordado que el despertador ya había sonado y que lo había parado, y que sin darme cuenta me he quedado dormido otra vez cuando se supone que tenía que levantarme. A las siete y cinco he salido de la cama, cuando normalmente salgo entre diez minutos y un cuarto de hora antes.
A esas horas no es momento de ponerse a correr, y menos cuando aún tienes en la cabeza los ecos del sueño-tortura (un trabajo soberbio, neurona) y estás aún más fuera de juego que dentro. Así que me he autoconvencido a tomarme con calma las cosas y seguir mi ritmo de siempre, pensando que si entro más tarde tampoco pasa nada porque puedo compensarlo saliendo más tarde, que hoy por la tarde no tengo gym ni nada urgente por hacer, sólo el tupper para mañana.
Al llegar a la estación he cogido el mismo tren de cada día.
Es lo que tiene el KosMos, que adora descolocarte. ¿Que te ha provocado un repentino sueño matutino y por su culpa vas a llegar tarde al trabajo pero no te importa lo más mínimo? Pues ahora te jodes y llegas a la hora de siempre.Bazinga! ZAS! EN TODA LA BOCA.
Oh KosMos, pérfido y retorcido KosMos.
Entonces he recordado que el despertador ya había sonado y que lo había parado, y que sin darme cuenta me he quedado dormido otra vez cuando se supone que tenía que levantarme. A las siete y cinco he salido de la cama, cuando normalmente salgo entre diez minutos y un cuarto de hora antes.
A esas horas no es momento de ponerse a correr, y menos cuando aún tienes en la cabeza los ecos del sueño-tortura (un trabajo soberbio, neurona) y estás aún más fuera de juego que dentro. Así que me he autoconvencido a tomarme con calma las cosas y seguir mi ritmo de siempre, pensando que si entro más tarde tampoco pasa nada porque puedo compensarlo saliendo más tarde, que hoy por la tarde no tengo gym ni nada urgente por hacer, sólo el tupper para mañana.
Al llegar a la estación he cogido el mismo tren de cada día.
Es lo que tiene el KosMos, que adora descolocarte. ¿Que te ha provocado un repentino sueño matutino y por su culpa vas a llegar tarde al trabajo pero no te importa lo más mínimo? Pues ahora te jodes y llegas a la hora de siempre.
Oh KosMos, pérfido y retorcido KosMos.