Lo bueno de llegar a los treinta es que llevas tantos años viviendo contigo mismo que ya pocas veces te sorprendes de lo que haces. Y lo bueno de la vida es que siempre puedes descubrir algo nuevo que te sorprende.
Hace dos días tuve un pequeño apretón social: tenía que ir a clase de Ritmo en el gimnasio, y también tenía que ir al cine con mi hermana y mi padre a ver
Thor. En un arrebato de "Sí. Yo. Puedo." decidí hacer ambas cosas. Una detrás de otra. Como los valientes.
Y cuando llegaron las cinco y media del martes, salí de la oficina tan pronto como pude y llegué a casa un poco tarde, porque nunca sales a la hora el día que tienes que hacerlo. Me preparé todo lo necesario para el tupper del día siguiente, hice la maleta para el gimnasio y fui a sufrir un poco de escarnio público al gimnasio. Total, ¿quién necesita autoestima?
Cuando acabó la clase vine corriendo a casa, me duché y terminé de preparar el tupper. Sólo tenía que emplatar (entuppar? entupperar?) y limpiar los cacharros que ensucié cocinando.
Una vez el tupper estaba en la nevera, fui a casa de mis padres y estuvimos haciendo tiempo, porque sorprendentemente había llegado con tiempo de sobra para llegar a la sesión de las 22:45.
Fuimos al cine, disfrutamos de la película (admitiré que se me hizo larga. Asgard es bonito, pero nunca he sido un gran fan de Thor) y llegué a casa a casi la una.
Normalmente me acuesto a las diez y media; a las once los días que me vuelvo loquísimo y me da por trasnochar. Así que imaginad el trastorno de sueño que supone esperar dos horas y media para ir a dormir.
El miércoles llegó sin perdonar, así que me levanté a las 6:45 y empecé la rutina diaria.
Por la tarde, al salir del tren fui a comprar, porque estaba muy bajo de agua. Es lo que tienen las fiestas locales, que no caes en ellas y te fastidian el lunes de compra. Después de hacer una cola inusitadamente larga para un miércoles, llegué a casa, ordené la compra, llené las botellas vacías de agua, ordené los cacharros de la cocina (por fin secos) y preparé la maleta para ir al gimnasio, a hacer Cardio Pump.
A las diez, una vez ya estaba en casa duchado y cenado, prácticamente me arrastraba por los suelos. Tenía suerte y la clase de machaque no me había pegado los brazos al cuerpo (curioso fenómeno que sucede cuando se te ocurre hacerle caso al monitor y coger más peso del que sabes que puedes levantar más de tres veces).
Encadenar trabajo + gimnasio + cine + casi seis horas de sueño + trabajo + más gimnasio es algo que no pensaba que sería capaz de hacer sin que me coaccionaran.
Sí, aún puedo cometer errores de los gordos. Bueno, van a juego conmigo. Eso sí, preferiría no recibir más sorpresas de éstas durante un tiempo, no creo que pueda seguir operando maquinaria pesada si vuelvo a hacer lo mismo.
¡Horóscopo!
Geminis en tarot.com
You may reconsider your previous plans for the day because you might want to add even more activities to your schedule. However, it's possible to take the power of positive thinking too far today. Your blind optimism could tempt you to overcommit, letting others down and leaving you discouraged. Be cautious; managing your time wisely enables you to accomplish more than you thought possible and could even prevent an unnecessary disaster.
¡Más actividades no! Ya he tenido bastante movimiento los dos últimos días, gracias.
Por otra parte, ¿ciego optimista? ¿Yo? Hombre, la parte de cegato no va muy desencaminada (debería ir a una revisión oftalmólogo, cada vez es más evidente que necesito al menos cristales nuevos), pero lo de optimista... ¡Tampoco hay que pasarse!