Ah, el Salón del Cómic. Había olvidado que es como el Salón del Manga, pero sin comida dentro.
Cuando hablamos de ir con mi hermana, nos planteamos comprar la entrada por anticipado. Aunque los últimos Salones del Cómic me los había saltado, cuando había ido siempre había ido rápido en las colas. La cola para comprar la entrada era larga, pero con la maravilla de taquillas de la Fira, que abrían unas cuantas y con personal que sabe contar el cambio, la cosa siempre va ligera. Y cola para entrar, bueno, prácticamente no había. Porque al fin y al cabo la gente ya tenía la entrada y la cola era para comprarla; es cuestión de andar hasta la puerta y que te partan la entrada.
( De todo se puede aprender. )
Para quitarnos un poco el mal sabor de boca, fuimos a comer al Viena, y con las pilas renovadas fuimos a una tienda de segunda mano especializada en dvds y blurays. Y ahí mi hermana parcheó un poco su alma. No encontró lo que buscaba, pero encontró otras cosas que le gustaron igualmente.
Y después fuimos a fnac a mirar un disco de All Time Low que tiene fotos del grupo y que mi hermana quería comprar y, bueno, pues se compró. Y yo estuve a punto de comprarme un libro nuevo de Marian Keyes pero al final no lo hice porque, no sé.
Para acabar por todo lo alto, el sábado fuimos a ver Sister Act: El Musical. Y, oye, qué buen rato. Oh, qué buen rato.
( Donde vaya, yo le sigo. )
Una muy buena experiencia. Dentro de poco empieza la gira, si tenéis oportunidad, no os la perdáis.
Cuando hablamos de ir con mi hermana, nos planteamos comprar la entrada por anticipado. Aunque los últimos Salones del Cómic me los había saltado, cuando había ido siempre había ido rápido en las colas. La cola para comprar la entrada era larga, pero con la maravilla de taquillas de la Fira, que abrían unas cuantas y con personal que sabe contar el cambio, la cosa siempre va ligera. Y cola para entrar, bueno, prácticamente no había. Porque al fin y al cabo la gente ya tenía la entrada y la cola era para comprarla; es cuestión de andar hasta la puerta y que te partan la entrada.
( De todo se puede aprender. )
Para quitarnos un poco el mal sabor de boca, fuimos a comer al Viena, y con las pilas renovadas fuimos a una tienda de segunda mano especializada en dvds y blurays. Y ahí mi hermana parcheó un poco su alma. No encontró lo que buscaba, pero encontró otras cosas que le gustaron igualmente.
Y después fuimos a fnac a mirar un disco de All Time Low que tiene fotos del grupo y que mi hermana quería comprar y, bueno, pues se compró. Y yo estuve a punto de comprarme un libro nuevo de Marian Keyes pero al final no lo hice porque, no sé.
Para acabar por todo lo alto, el sábado fuimos a ver Sister Act: El Musical. Y, oye, qué buen rato. Oh, qué buen rato.
( Donde vaya, yo le sigo. )
Una muy buena experiencia. Dentro de poco empieza la gira, si tenéis oportunidad, no os la perdáis.